La gilda es uno de los mejores acompañamientos para un vermut, así lo explica Martín Jaime, creador del vermut Turmeon y manager de Bodegas Jaime, ya que asegura que el vermut tiene un toque dulce y amargo que contrarresta a la perfección con el punto ácido de los encurtidos, el salado de la anchoa y la parte grasa que aporta el aceite de oliva y la propia oliva.
De hecho, a la hora de convocar el concurso para encontrar la mejor gilda de Zaragoza se plantearon la duda de cómo definir lo que era una gilda sin coartar la libertad creativa de los hosteleros. Al final, decidieron utilizar la definición establecida para el que se ha considerado el creador de este aperitivo, Joaquín Aramburu, “verde, salada y un poquito picante”. Y a partir de ahí, la imaginación, hace el resto.
Como cuenta Martín Jaime, el vermut es una bebida que está viviendo un buen momento ya que se está extendiendo su consumo. Se está viendo el auge del splitz, el aperitivo italiano que se toma antes de la cena y que acompaña al cambio de tendencia en el que se sale más de tarde que de noche. Además, el vermut se utiliza en la base de los cócteles clásicos, que también están volviendo, además de fomentar también la creatividad.
Un ejemplo lo tienen en Bodegas Jaime con un negroni verde que está elaborado con base de cannabis. Marín Jaime explica que se infusiona con el tallo y la semilla del cannabis y se le aporta aromas como lúpulo, tomillo y limón para recordar los aromas herbáceos del cannabis.