Aragón ha bajado de la barrera de los 50.000 parados. El desempleo se redujo en mayo en 1.167 personas, es decir un 2,3% menos respecto al mes anterior. De esta manera, hay inscritas en las oficinas del INAEM 49.305 personas. Es la cifra más baja desde el año 2008. Por sectores, el paro especialmente en servicios y en la agricultura por el inicio de la campaña de recogida de la fruta.
Desde el Gobierno de Aragón valoran muy positivamente estos datos, especialmente, la evolución del desempleo en la provincia de Teruel o en el sector de la construcción, que anotan sus mejores registros históricos. La vicepresidenta, Mar Vaquero, cree que las cifras demuestran la reactivación de la economía aragonesa, a falta todavía de que se vea el impacto de nuevas inversiones millonarias anunciadas en los últimos meses. El presidente, Jorge Azcón, ha valorado que estamos en la senda del pleno empleo.
La presidenta de CEPYME, María Jesús Lorente, que toca poner el foco en el paro estructural y en los aproximadamente 20.000 parados que deben ser recualificados para su inserción laboral.
Informe del CESA sobre siniestralidad
A nivel empleo uno de los retos es mejorar las condiciones laborales y, especialmente, combatir la siniestralidad. En ese sentido, el Gobierno de Aragón y los agentes sociales seguirán trabajando para combatirla en base a un informe pionero, encargado por el ejecutivo al Consejo Económico y Social, que profundiza en la dimensión de este problema en los últimos cinco años y ofrece propuestas para combatirlo. La prevención debe ser considerada una oportunidad y no sólo una obligación legal para las empresas.
Los agentes redoblan esfuerzos para reducir las altas cifras de fallecidos en accidente laboral en 2023 y 2024. Se han impulsado nuevos programas de concienciación y, además, en Aragón ya contamos con 86 de los 91 inspectores que nos corresponden. En su informe el CESA pide fomentar la formación de los trabajadores y los servicios de prevención, evitando su externalización. El presidente del Consejo, Juan García Blasco, ha incidido en el impacto económico de la siniestralidad. “El 2,3% del PIB aragonés es gasto en defectos de técnica preventiva”, ha dicho.