Esta organización, que representa a más de 160 000 socias y socios y cuenta con una facturación anual media que supera los 2 200 millones de euros anuales, se solidariza con sus cooperativas asociadas de la provincia de Ciudad Real y, en especial, de la comarca del Campo de Montiel, adhiriéndose a las alegaciones que han presentado las mismas al proyecto de Quantum Minería, por su potencial impacto negativo en el sector agroalimentario, la salud pública y la comunidad local.
Cooperativas Agro-Alimentarias de Castilla-La Mancha, en un comunicado público, rechaza el proyecto de minería de tierras raras al considerar que "puede perjudicar el futuro de la actividad agraria y vitivinícola de la zona", ser "un factor de riesgo para el uso de los recursos hídricos" y "un obstáculo para el desarrollo comercial de productos y figuras de calidad ciudadrealeños de gran reputación en los mercados nacionales e internacionales".
Además de "la potencial contaminación de aire, agua y suelo por el riesgo de liberación de sustancias químicas peligrosas en el proceso de extracción".
En este contexto, considera que cualquier proyecto que no tenga el apoyo de la comunidad local no debería ser aprobado y, por ello, espera que las autoridades competentes de la Junta de Castilla-La Mancha tomen en cuenta las alegaciones presentadas.